ISLA DE LA JUVENTUD, Cuba, 1 de septiembre (Lamassiel Gutiérrez, Isla Press / www.cubanet.org) - Siete presos comunes se inyectaron sangre que contenía VIH, en la prisión El Guayabo, Isla de la Juventud.

Los reclusos entregaron varias cajas de cigarrillos a un preso infestado, conocido como “Niche”, a cambio de una jeringuilla con sangre contaminada.

“Niche” se encontraba en una celda de castigo, donde le pasó la jeringuilla a Yoel, Yolandi, Alexis y otros cuatro, de los que no se conocen los nombres, todos con penas entre 18 y 20 años.

Los siete reclusos fueron detenidos por robo con fuerza cuando tenían 16 años, y aunque eran menores de edad, los encerraron en una cárcel de adultos, donde han sufrido abusos físicos y sexuales.

El propósito de los siete jóvenes al inocularse VIH fue que los trasladen a la prisión de los enfermos de SIDA, para recibir mejor trato, según informó el pasado 24 de agosto el preso político Rolando Jiménez Posada.

Álvaro Yero Felipe

29 de agosto de 2010

La Habana, Cuba – www.PayoLibre.com – El miembro del Comité Central del Partido Comunista de Cuba, Rafael Delgado, fue apuñalado en horas de la tarde del 22 de agosto en la barriada El Moro, en Arroyo Naranjo, y se encuentra en estado grave.

El secretario del partido, la figura política más importante a nivel municipal, fue atacado por dos individuos que no han sido identificados.

Según una fuente afín al Ministerio del Interior que pidió el anonimato, el hecho fue producto de un ajuste de cuentas.

Mientras Rafael Delgado se debate entre la vida y la muerte en un hospital, la policía revuelve cielo y tierra y pudo conocerse que hay al menos unos 8 sospechosos detenidos. No se ha podido precisar si alguno de ellos estuvo entre los atacantes.

Lamasiel Gutiérrez


LA HABANA, Cuba, 23 de agosto, (Lamasiel Gutiérrez, Agencia Isla Press, www.cubanet.org) - El pasado lunes 16 de agosto, en el poblado habanero de San Antonio de los Baños, un joven de 26 años, llamado Yandi, murió luego de recibir 16 puñaladas propinadas por un individuo llamado Rubén, con un largo historial delictivo.

El hecho ocurrió en el centro laboral de Yandi, quien fue sorprendido por el atacante cuando se encontraba merendando junto a sus compañeros de trabajo, quienes presenciaron el ataque, atónitos, sin poder intervenir a tiempo. Yandi recibió la primera puñalada en el pulmón, cuando se encontraba de espaldas; las demás le fueron propinadas en el rostro y en los ojos, mientras pedía al asaltante que no lo matara.

Ambos se conocían del barrio, habían trabajado juntos y habían peleado en varias ocasiones con anterioridad. El asaltante tenía pendiente una condena de cinco años por robo con fuerza y violencias en las personas y el asesinato de Yandi ocurrió precisamente el día del juicio.

La víctima trabajaba en el matadero de aves que se encuentra en la salida del pueblo y Rubén había sido despedido del lugar, por eso pudo entrar sin dificultades; expresó José Yánez Oliva, fuente de esta información.

Yánez Oliva también dijo que el día anterior a los hechos, Rubén había cogido la moto de Yandi y la había roto.

En el matadero trabajan aproximadamente 100 empleados, muchos de los cuales fueron testigos del incidente. Un amigo de Yandi logró aguantar a Rubén y le gritó que no lo apuñalara más, pero ya era demasiado tarde.

Como es costumbre, la prensa oficial no informó sobre el hecho.